Duff McKagan (Guns N' Roses) y la canción de Prince que le ayudó a dejar Seattle: “Mis amigos estaban diezmados por la heroína”

 El bajista de Guns N' Roses supo que tenía que abandonar ese ambiente durante su juventud .

Duff McKagan ha recordado la decisión de, en su juventud, abandonar Seattle después de que una epidemia de adicción a la heroína “diezmara” a sus amigos en los '80. Curiosamente, fue un disco de Prince el que le aportó la fuerza y el consuelo suficientes como para coger fuerzas, hacer las maletas y partir en busca de una nueva vida en California. 

Aunque su fama con Guns N' Roses lo eclipsa, lo cierto es que Duff fue uno de los músicos más prominentes de la escena punk de Seattle, ayudando a sentar las bases de lo que, en la siguiente década, sería el grunge. Gente como Stone Gossard, guitarrista de Pearl Jam y Mother Love Bone, ya había alabado a McKagan por ser “una figura clave” que tocó en todas las bandas de punk importantes que había en aquel momento en la zona. Sin embargo, una vez más, bajo el escenario había una plaga de personas cuya vida estaba siendo destrozada por la heroína. Duff tenía que irse y comenzar de cero.

Un clásico de Prince

Ahora, charlando con Classic Rock (vía Ultimate Guitar), Duff ha recordado aquel periodo y cómo el disco '1999' (1982) de Prince le ayudó a sobrevivir a aquella época, además de a coger fuerzas para empezar de nuevo.

"Tenía dieciocho años, aún vivía en Seattle y la heroína había diezmado a mis amigos. La canción 'Something In The Water (Does Not Compute)' fue una vía de escape para mí, ese disco me hizo darme cuenta de que tenía que irme de Seattle. Dos años después lo hice. Más tarde escribí una canción llamada 'Seattlehead'. Creo que fue después de 'volver a casa'".

"Me sentía mejor, estaba en mi sitio, un lugar seguro, encantador y bueno. Se publicó en el álbum 'Dark Days' de Loaded, pero fue escrita mucho antes, a principios de los noventa, y trataba de mi traslado de Seattle a Los Ángeles, en 1984, cuando la Ciudad de los Ángeles 'me dejó entrar y luego me cerró la puerta de un portazo'".

El año pasado, Duff también explicó que no quería mudarse de Seattle, pero que la situación era tan desesperada que no pudo hacer nada al respecto: "Seattle tenía una gran escena musical. Por desgracia, la heroína llegó hacia el 83 y me quedé sin opciones. No quería mudarme a ningún sitio; estaba tocando con gente estupenda. En cada banda en la que tocaba, estaba a una persona de una banda [que era] jodidamente buena. La escena de Seattle despegó un par de años después... Era sólo que, en mi grupo, todo el mundo estaba colgado, y era hora de irse. Si quería hacer esto, era hora de salir".