John Lydon (Sex Pistols) respeta a Gene Simmons (KISS) a pesar de su afán por vender: “El problema es...”

 Pese a que Gene Simmons es demasiado "establishment" para un punk como Lydon, el de los Sex Pistols respeta al de Kiss 

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Gene Simmons es un tipo que se caracteriza por dos cosas: no deja indiferente a nadie cuando abre la boca y, además, te puede vender prácticamente cualquier cosa. Ya sean ataúdes, preservativos o calcetines, si le puede poner encima la marca Kiss, te lo va a vender. Muchos pensarían que un icono de la rebeldía y el punk, contestatario y antisistema, como John Lydon, más conocido como Johnny Rotten cuando estaba en Sex Pistols, no respetaría su actitud. Pues bien, nada más lejos de la realidad. 

En una nueva entrevista con Classic Album Review (vía Ultimate Guitar), el que fuera cantante de Sex Pistols, ahora reemplazado por Frank Carter, ha admitido que respeta a Gene Simmons a pesar de todo. Y es que el vocalista lo tiene claro, por encima de artista, el Demon es un hombre de negocios, alguien que sabe generar beneficios. Y lo que es más importante, no se esconde. No oculta su amor por el dinero detrás de una ideología impostada o una falsa humildad.

"Es una figura controvertida porque tiende a ser descarado en su amor por el comercialismo, y eso me parece absolutamente correcto. Convertiría cualquier cosa en un llavero, una camiseta o un collar en un santiamén. Ese es su juego y su mundo".

Y es que Lydon respeta que Simmons vaya de cara, no como, según él, otras bandas: "Es un hombre de negocios, y por eso no tengo ningún problema. Es cuando las bandas intentan escabullirse metiéndotela doblada y fingen que son indiferentes a esas cosas. Ese es un problema: el engaño, pero absoluto, la fanfarronada sobre sus hazañas en la vida, los elogios".

Fan de su actitud... pero no de su sonido

Lo cierto es que, aunque no ha dado su opinión manifiesta sobre lo que piensa de la música de Kiss, Lydon sí que ha recordado escuchar ensayar a la banda, que promete ahora resurgir en forma de avatares virtuales, y no quedarse nada impresionado con lo que sonaba: "Hubo un momento divertido con el Demon [el mote de Gene Simmons], porque PIL -hace unos cinco o seis años, quizá- estábamos ensayando en América, en Los Ángeles, en Highland, creo que era. Estaban en el estudio, enfrente y el ruido que salía era muy, muy malo. Era irremediablemente... ugh".