La apestosa razón de Bryan Adams para cancelar su último concierto: “Grasa, aceite y trapos”
El canadiense ha tenido que cancelar su último concierto por una razón que podría provocarte arcadas
El último concierto de Bryan Adams en Australia se ha cancelado por culpa de un apestoso atasco en el alcantarillado por culpa de “grasa, aceite y trapos”.
El legendario artista canadiense iba a tocar en el RAC Arena de Perth ayer, 9 de febrero, pero se acabó encontrando con una situación insalvable por motivos de salud y seguridad. A nadie le gusta que huela a heces cuando va a disfrutar de un concierto (esperamos que no, al menos).
Según informa NME, la empresa de aguas de la ciudad de Australia Occidental emitió una advertencia en la que señalaba que una tubería obstruida podía provocar atascos en los aseos del local. De haberse concentrado varios miles de personas, todos con sus correspondientes necesidades fisiológicas, para ver a Adams, la cosa podría haber acabado muy mal.
Lo que ha pasado en el alcantarillado se llama “fatberg”, un juego de palabras con “fat”, grasa, e “iceberg”. En resumen, aceite y grasa se han solidificado en toallitas y trapos tirados al váter y que han acabado en el alcantarillado. Todo esto ya había provocado varios “desbordamientos de aguas residuales” en las calles que rodeaban al recinto. Haber celebrado el concierto podría haber tenido consecuencias apestosas y hubiera supuesto un peligro para la salud pública.
"Pedimos disculpas por las molestias que esto ha causado y proporcionaremos más actualizaciones según sea necesario", dijo la compañía de agua en un post en Facebook, aconsejando también a la gente de la zona que evitaran el contacto con el "agua encharcada" en las calles cercanas.
Poco después, Adams compartió un mensaje en el que agradecía a los fans su “paciencia y apoyo” mientras buscaba una fecha alternativa (o por lo menos hasta que se hiciera con suficiente ambientador de pino).
"Siento mucho que no hayamos podido hacerlo esta noche; tenía muchas ganas de veros a todos", añadió el artista.
El promotor del festival también añadió que habían hecho "todo lo posible" para que el espectáculo se celebrara como estaba previsto, pero que las circunstancias estaban "fuera del control de Bryan Adams, Frontier Touring y el RAC Arena". También añadieron que la cancelación era "amargamente decepcionante". Aún con todo, siempre es mejor un concierto cancelado que una experiencia digna del medievo.
Ahora, a Adams le queda una fecha pendiente en Perth que intentará reprogramar, mientras que este semana se prepara para tocar en Brisbane, Melbourne y Sídney.
Donde no habrá problemas en el alcantarillado, a buen seguro, será en el festival Músicos en la Naturaleza, donde Bryan Adams tocará, sin problemas de esta apestosa índole, el próximo 7 de junio de 2025.
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