El concierto final de Rush generó “una sensación rara”: “A penas podía andar”
Geddy Lee y Alex Lifeson recuerdan cómo discurrió la gira final de Rush antes de que se terminara su carrera

Cuando Rush decidió retirarse pilló a muchos por sorpresa, pero tenía lógica. Alex Lifeson sufría de artritis psoriásica y Neil Peart de una tendinitis crónica. Los años no perdonan y, por eso, el grupo decidió que era el momento de dejarlo.
Ahora, hablando con Classic Rock (vía Ultimate Guitar), Geddy Lee y Lifeson han recordado algunos de los momentos clave de la gira final de Rush. El entrevistador señaló que parecía que, a medida que avanzaba la gira, Lifeson estaba más feliz y Lee más triste. Sin embargo, el guitarrista no está de acuerdo del todo con eso: "Bueno, yo estaba más en el bando de Ged. Tocábamos bien, el espectáculo era muy divertido para nosotros y para el público, y teníamos buena energía a pesar de tocar tres horas a los sesenta años. A Ged y a mí nos decepcionó que Neil exigiera tocar sólo en un número limitado de fechas, lo que impedía una gira por el Reino Unido y Europa. Creo que una docena de fechas más nos habrían ido mejor".
"Y hubo un momento en el que creo que Neil estaba dispuesto a ampliar la gira y añadir algunos conciertos más, pero entonces contrajo una dolorosa infección en un pie. Apenas podía caminar hasta el escenario".
"Le consiguieron un carrito de golf para llevarlo al escenario. Y tocó un espectáculo de tres horas, con la intensidad con la que tocaba todos los conciertos. Fue increíble, pero creo que fue el momento en el que decidió que la gira sólo iba a durar hasta ese último concierto en Los Ángeles".
La “rara sensación” de ofrecer el último concierto
A medida que avanzaba la charla, la banda también recordó su último show, en el que Peart se levantó de la plataforma donde estaba su batería para abrazar a sus compañeros: “La primera vez en cuarenta años que lo hacía", señaló Lee. "Fue un momento precioso".
Lifeson también recuerda la “sensación rara” que tuvo al tocar aquella noche: "Recuerdo estar en el escenario y pensar cuántas veces habíamos tocado en el Forum y preguntarme cuántas veces habíamos hecho 'Working Man' allí, porque prácticamente ha estado en el set desde el primer día".
"Fue una sensación rara saber que probablemente sería la última vez que tocaríamos juntos alguna de esas canciones. Intenté empaparme de cada momento y objeto en ese último concierto. Conté los minutos en el reloj gigante que tienen allí, se puede ver desde el escenario".
"Y me quedé mirando todas esas caras, gente a la que no conocía personalmente, pero a la que saludaba con alegría cuando les veía volver a tantos de nuestros conciertos a lo largo de tantos años; miré a mis compañeros de banda y ya les echaba de menos y me entristeció ver tanta alegría en la cara de Neil cuando nos quedaban los últimos compases de la última canción que tocábamos juntos, cuando por fin terminábamos nuestro set".
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