“Exploté y me puse a llorar”: el verdadero motivo por el que Adrian Smith dejó Iron Maiden
El que fuera guitarrista de Iron Maiden explica los motivos por los que abandonó el grupo

En 1990, Adrian Smith dejaba su puesto como guitarrista de Iron Maiden. Aquel fue el primer paso de una etapa oscura, en la que, unos años después, Bruce Dickinson también dejaría de ser cantante de la banda. Muchos se preguntaron qué era lo que había pasado realmente para que se produjera un cisma de este calibre en el grupo. Por suerte, todo se solucionó en 1999 cuando ambos artistas regresaron al conjunto inglés, donde permanecen hasta hoy.
Ahora, charlando con Classic Rock (vía Ultimate Guitar), el hacha de Maiden ha explicado por qué dejó la banda. Lo cierto es que, para 1990, a Iron Maiden le había ido muy bien, algo que, para Smith, se convrirtió en un arma de doble filo.

"Los años ochenta fueron muy intensos. Para todos. Tienes que ser fuerte mentalmente para salir ahí fuera y actuar cada noche. Y yo tenía algunos problemas. Muchas veces me encerraba en mí mismo. Pero a veces me volvía completamente loco".
A Smith comenzó a tener problemas no sólo con el alcohol, sino también con la cocaína, algo que provocó que se sintiera aislado y que, al final, no se sintiera con las fuerzas para decir lo que pensaba.
"Seguimos machacando", reflexionó. "Es lo que hay que hacer. Y cada uno tiene sus propios problemas, pero te intentas mantener entero", recuerda Smith.
Sin embargo, para 1990, la presión fue demasiada: "Había empezado a sentirme asfixiado en la banda", afirma. "No sabía lo que quería hacer". La banda tuvo que tomar cartas en el asunto: "Me sentaron y me dijeron: '¿Te interesa seguir? Tienes que estar al cien por cien. Nos vamos de gira otros nueve meses'".
"Así que... eso fue todo. No fue como si dijera: 'Bien, dejo la banda'. Hubo mucha agonía. Y como dije antes, las cosas no siempre son blancas o negras", admite Adrian.

Durante mucho tiempo, Smith se sintió bien con su decisión. "Me sentí un poco aliviado", recuerda. "Porque yo no era feliz. Todo el mundo lo sabía. Así que me compré una casa, me casé, tuve hijos...".
Pero no fue el final
Aún con todo, esto no fue lo último que supimos de Smith con Maiden hasta 1999. Años antes, en 1992, Steve Harris le pidió a Smith que se subiera, como invitado, al escenario, durante un concierto en el festival Monsters of Rock de Donnington Park.

"Fue mi mujer la que me dijo que lo hiciera. Sólo para demostrar que no había resentimientos. Pero cuando llegué, estaba nervioso y empecé a beber whisky. Así que estaba bastante excitado cuando empezaron. Estaba al lado del escenario, viéndoles tocar todas las canciones que yo solía tocar. Exploté y me puse a llorar...”.
"Me sentí abrumado. Hasta ese momento, no había experimentado mucho arrepentimiento. Pero entonces me di cuenta. Había mucho de mi vida en esa banda, y estaba muy cerca de donde solía estar".
"Por suerte, tuve tiempo suficiente para recomponerme. No había traído guitarra. Sólo cogí una de Dave. Janick me hizo una llave en la cabeza y me sacó a la pasarela antes de que tocara una puta nota. Y cuando empezó 'Running Free', pensé: "Joder, esto va un poco rápido". Pero lo conseguí, más o menos. Y al final, fue algo bonito".
Smith no dejaría de llevarse con sus amigos de Maiden. Aquel tiempo le puso bien y, por suerte, ahora es feliz dentro del conjunto.
Podes Comentar