El que fuera batería de The Police recuerda los últimos días de existencia de la banda
Stewart Copeland ha recordado los últimos y turbulentos días de actividad de The Police, añadiendo que había momentos en los que quería “asfixiar a Sting hasta matarlo”.
Para el momento en el que el grupo lanzó su quinto y último disco de estudio, ‘Synchronicity‘, la dinámica de la banda se había convertido en “el infierno en la tierra”.
«Era un lugar muy incómodo y nos volvíamos locos el uno al otro«, recordaba Copeland en una entrevista reciente con el New York Post (vía Ultimate Classic Rock). «Ahora entendemos de dónde venía toda esa tensión. Y de hecho, dada esa comprensión, estoy muy agradecido de que le sacáramos hasta cinco discos a Stingo, porque para entonces… él ya tenía una idea muy clara de cómo debían ser los arreglos».
El batería tiene claro que su gran problema con Sting vino de que ambos tenían opiniones distintas sobre lo que debía ser la banda: «Al principio era una colaboración«, comenta Copeland sobre la dinámica de composición del grupo. «Para él se convirtió en un compromiso cada vez mayor, y cada vez le resultaba más difícil llegar a esos compromisos».
Para Copeland, la ruptura de la banda evitó, al menos, que ambos artistas acabaran llegando a las manos. De hecho, el batería admite que, cuando Sting le dijo cómo tenía que tocar sus partes de batería, las cosas acabaron por estallar.
«Los momentos en los que estuve más cerca de cometer un homicidio, los momentos en los que era absolutamente crítico que estrangulara a Sting hasta matarlo, eran cuando se acercaba a mí y me decía algo sobre el hi-hat«, reconoce Copeland.
En retrospectiva, el batería reconoce que él y Sting tenían filosofías distintas, ambas válidas.
«Sting buscaba un lugar bello y crear algo sereno, conmovedor y, me atrevería a decir, intelectual», explicó Copeland. «Para mí, se trata de quemar la casa: es una fiesta«.